9ª Horcadas- Cistierna

Camino

Camino

Un paseo por el pueblo nos llevó hasta la iglesia y poco más. Horcadas es un pueblo muy agradable, limpio y con las casa muy bien arregladas. A pesar de la altura ayer hizo un calor infernal todo el día, algo no habitual allí.
Tras nuestro breve paseo nos fuimos al bar a tomar unos vinos y cenar. Coincidimos con algunos vecinos y tras varias rondas comenzaron a fluir nuestras viejas historias de caminantes.
Poco a poco se fueron retirando todos y nos quedamos a cenar Joseba y yo en una mesa y el matrimonio del bar con su nieta en la otra. Una cena sencilla fue complementada en mi caso con una ración de sopa de marisco oferta de la señora del bar.
Esta mañana hemos amanecido a las 6:30 para ponernos en marcha. Joseba ya desde el primer momento ha dado muestras de que hoy no iba a ser su día: dolor de cuello, de cabeza, de pierna y alguna cosa más. Espesito desde el inicio y hasta el final de etapa. Para colmo ha decidido que hoy iba a ganar la carrera y desde los primeros pasos se ha lanzado a una media similar a la de Fernando Alonso en sus últimas carreras de F1.
Etapa sencilla aunque larga y marcada por el calor. La primera parte desciende junto al pantano de Riaño hasta llegar a la presa. Para llegar hay que atravesar un enorme túnel que da muy mal rollo. Las vistas desde la presa son increíbles.
Desde allí nos desviamos por una carretera secundaria hasta alcanzar la calzada romana del Esla, la estrella de esta etapa.
El camino va todo el tiempo paralelo al río. Hoy el caudal era impresionante porque, según nos han contado, habían abierto compuertas para bajar agua de riego. El espectáculo era impresionante con un río que llevaba agua hasta el límite de desbordarse.
En Crémenes hemos salido del camino para cruzar el río y llegar a algún bar a tomar café. Tras algunas vueltas y varios juramentos en arameo hemos encontrado una casa rural que nos ha ofrecido un café y me ha permitido comprar una botella de agua para mi bolsa de la mochila.
Entre senderos junto al río, a veces demasiado cerca del agua, los juramentos de Joseba quejándose de la etapa y el calor abrasador hemos ido haciendo quilómetros casi sin interrupción.
Poco antes de llegar a Cistierna se pasa por unas ruinas de una antigua explotación minera de hierro y carbón. Aún se ven las montañas de carbón ennegreciendo el paisaje e incluso se dibuja el raíl de algún tren de vía estrecha.
Cistierna es un pueblo grande y con todos los servicios. El albergue se encuentra al otro extremo del pueblo cuando las fuerza ya comienzan a decir basta. Además al llegar la impresión que nos hemos llevado nos ha hecho pensar lo peor: una casa vieja y descuidada que parece abandonada desde años, sucia y descuidada. He llamado a un teléfono que había en la puerta y me han dicho que tenía que ir al Ayuntamiento a coger la llave.
Después de un buen rato esperando ha aparecido un señor que me ha acompañado al albergue, donde esperaba Joseba.
La realidad ha sido bien diferente porque el albergue está bastante aceptable,
es viejo pero está cuidado por la gente de la asociación y tiene todos los servicios mínimos. Tenemos una habitación doble sencilla pero cómodo por 5 euros por cabeza.
Una vez completadas nuestras tareas peregrinas de ducha y lavado de ropa nos hemos ido a comer al Restaurante «Moderno» donde hemos dado cuenta de un menú muy digno por 10 euros.
Luego hemos ido a un bar de la plaza del ayuntamiento a tomar algo y ver el Tour. El señor del bar nos ha quitado el volumen de la tele porque venían los paisanos a jugar la partida aunque Joseba, en un ataque de dignidad, se ha lanzado hacia la barra a exigir volumen para nuestro recorrido ciclista. El resultado es que nos hemos quedado a ver la tele mientras los de la mesa de atrás voceaban jugando al subastado. Al menos la consumición nos ha salido casi gratis porque la camarera se ha equivocado y nos ha cobrado varios chupitos de menos.
Tras el Tour hemos ido a dormir un ratito la siesta mientras el calor comenzaba a disminuir. A media tarde hemos ido al super a comprar algo para el desayuno porque mañana no vamos a encontrar nada hasta el final de etapa.
Cistierna es cruce de caminos entre el camino Vadiniense y el camino Olvidado que pensamos hacer el año próximo así que esperamos regresar en unos meses por aquí.
Ahora vamos a tomar unas cervezas y algunas tapas para ir a dormir temprano a ver si a Joseba se le cambia el día para mañana y, sobre todo, si podemos evitar el calor insoportable que tememos que mañana nos acompañe toda la etapa.

Ermita de Horcadas

Ermita de Horcadas

Albergue "Los Toriles"

Albergue «Los Toriles»

Vista del pantano de Riaño

Vista del pantano de Riaño

Río Esla

Río Esla

Ermita en el camino

Ermita en el camino

Río Esla

Río Esla

Vistas del Río

Vistas del Río

Calzada romana del Esla

Calzada romana del Esla

Detalle de la calzada

Detalle de la calzada

Llegando a Cistierna

Llegando a Cistierna

 

Río Esla

Río Esla