Camin dels bons homes: 2ª Etapa. Gósol – Bagá

Después de una dura e intensa primera etapa la planificación nos ofrecía algo más sencillito pero, nada más alejado de la realidad: este camino no tiene regalos y los desniveles de subida y bajada que se acumulan cada día hacen que el trazado sea bastante duro. Al menos queda el consuelo de la belleza de la mayor parte de los tramos, siempre muy alejados de núcleos de población y acercándonos cada vez más a los Pirineos.

La etapa de hoy es fácil de definir: una subida constante desde el inicio hasta el quilómetro 8 para salvar 600 metros de desnivel y un constante descenso hasta el final en el quilómetro 26 con 1.100 metros de bajada.

Por la mañana nos levantamos temprano para aprovechar el fresco. La ruta la hemos realizado sin ninguna dificultad. Se trata de dar la vuelta por la otra cara a Pedraforca paralelo al parque natural del Cadí que atravesaremos en la próxima etapa. Precioso todo ese tramo entre Pedraforca y el macizo del Cadí y segunda jornada completada sin incidencias que mencionar.

Para llegar al hotel hemos tenido que atravesar todo el pueblo porque se entra por una esquina y el hostal está en la otra punta.

Hemos llegado a buena hora de comer en el hotel de Bagá Cal Batista, a la salida del pueblo. El hotel regular aunque la comida estuvo aceptable. Tampoco es que la atención sea alucinante pero nosotros no somos muy exigentes. 

Por la tarde nos dimos una pequeña vuelta por el pueblo y fuimos a tomar algo para cenar en un bar porque tampoco es que nos dieran muchas opciones en el restaurante. El pueblo tiene una bonita plaza con soportales, un puente, una torre y poca cosa más. Se encuentra allí un centro de interpretación del camino pero no lo hemos podido visitar porque a esa hora estaba ya cerrado.

 

Descripción de la etapa: pincha aquí.

Resumen de la etapa: 26,33 km con 602 metros de subida y 1.105 de bajada.

Ruta en wikiloc.

Camin dels bons homes: 1ª etapa. Berga – Gósol

A los que nos gusta caminar creo que deberíamos hacer, al menos una vez en la vida, este camino. Los paisajes son de una belleza imposible de describir ni de plasmar en las fotos. Cada tramo de camino, cada senda, cada rincón esconde parajes preciosos que se pueden disfrutar sólo a pie y guardando silencio entre los sonidos del bosque o de la montaña.

Vayamos por partes: la llegada a Berga fue verdaderamente accidentada ya que nuestro autobús se averió y estuvimos más de una hora tirados en la carretera esperando, primero que lo arreglaran, y después hasta que vino otro bus a recogernos. Al menos todo este rato nos sirvió para que pudiéramos ponernos al día de todo nuestro año, de nuestras peripecias familiares y, por supuesto de nuestros muchos planes de futuro que pasan por lo poco que nos va quedando a los dos para jubilarnos.

img_1203.jpgUna vez llegados a Berga y acomodados en el hotel Estel nos fuimos a dar una vuelta al pueblo para tomar algo y hacer tiempo para la cena ya que no habíamos comido casi en todo el día. La cena bien en el hotel y prontito a la cama que el día siguiente se presentaba complicado.

 

Primera etapa: Berga – Gósol

Las perspectivas de etapa eran complejas porque las guías marcan treinta y algo en quilómetros y unos 1300 metros de desnivel de subida acumulado. Para colmo no habíamos podido comprar y entre Berga y Gósol no hay nada (nada de nada de nada, de nada). Como la etapa era larga ya desde el santuario de Queralt (el inicio oficial de la ruta) habíamos decidido no hacer el tramo desde Berga al santuario andando sino pedir.

La mañana empezaba muy cubierta en la parte de arriba pero al llegar al santuario ya estaba casi completamente despejado y el resto del día ha estado abierto y muy cómodo para la marcha.

Tras la visita a la cueva nos hemos puesto en marcha. Lo primero que nos ha llamado la atención ha sido la mezcla entre el bosque mediterráneo y el de hoja caduca. Resulta curioso ver espacios que podrían pasar por zonas de muy al norte de España junto a otras más parecidas a nuestras regiones. La mezcla de pinos o encinas con hayas e incluso acebos resulta muy interesante. Estos bosques no son tan húmedos como los del norte y eso hace que haya mucha menos vegetación en el suelo, lo que facilita el paso por los caminos tanto por la hierba como por la cantidad de agua que se acumula en el suelo.

La primera parte de la ruta va entre alguna que otra casa residencial siempre por pequeñas sendas en constante ascenso. El resto de la etapa un constante sube-baja que hace muy duro el recorrido, además de la cantidad de quilómetros.

Al llegar a Gósol hemos parado a tomar algo en el bar de entrada y nos hemos enterado de que el albergue está más de un quilómetro del pueblo. Muy cansados ya hemos bajado hasta allí para encontrarnos todo cerrado hasta las 5 que ha llegado la persona que lo lleva. Es un lugar precioso junto a un río, un molino antiguo restaurado como albergue, básico pero con todos los servicios fundamentales.

Realizadas las labores cotidianas (ducha y lavado de ropa) nos hemos vuelto al pueblo a tomar algo y hacer tiempo para la cena. Hemos buscado también una wifi con la que conectar y decir, al menos, que estamos vivos. Luego hemos bajado a cenar y hemos disfrutado de un agradable rato de tertulia antes de que mi compañero me haya abandonado mientras yo me he salido a la terraza a escribir un rato.

Descripción de la etapa: pincha aquí

Información general del camino: página oficial. Ofrece todo tipo de información sobre alojamientos, ruta y demás. Son muy amables y contestan rápidamente cuando te pones en contacto con ellos. Nosotros les pedimos las credenciales y nos las mandaron sin problemas. Es una página de referencia para todo el que quiera hacer este camino. Es imprescindible informarse bien sobre rutas y estado del terreno ya que al tratarse de alta montaña algunas zonas pueden presentar problemas de nieve o de barro en determinadas épocas del año.

Hotel Estel en Berga.

Albergue de montaña Molí de Gósol.

Total 33,44 km en 8h 40 min, con 1186 m. de subida y 928 de bajada. Ver ruta en wikiloc.