6ª Reliegos – León

Nada destacable ayer desde que terminé de escribir. La tarde fue bajando su intensidad en el calor pero demasiado despacio. La fui ayudando con un par de cervezas y algún vinito blanco.

Revisando la etapa de León busqué alojamiento en la guía y encontré el albergue y residencia Unamuno con habitación individual con baño por 20 euros y al lado de la catedral. Millán no quiso reservar porque dice que se va a quedar en las Carvajalas a vivir una nueva noche peregrina.

El menú de la cena algo simple y después un orujo para terminar de dejar caer la tarde. Por supuesto que mis excesos en el alcohol no se ven acompañados como cuando voy caminando con Joseba ya que Millán no pasa de la coca-cola, la clara de limón o, como mucho, el tinto con casera de la comida.

En la habitación acabé de ver el capítulo de Mastechef gracias a la wifi y sobre las doce y algo a dormir.
El despertador ha sonado a las seis y por un momento pensé que no era mío extrañado por no haber sido violentamente despertado por peregrinos de a partir de las 4 de la mañana.
Hemos salido en dirección a Mansilla por el último tramo de senda con árboles para abandonar definitivamente este monótono tramo leonés. La mañana estaba algo fresca comparado con estos días atrás y nos ha hecho estos 6 quilómetros como un agradable paseo.

Al entrar a Mansilla han abierto un nuevo albergue y bar. Es un local muy aséptico, industrial y modelo turigrino de nivel. Las tostadas las tienen en la barra y te las ofrecen frías.
Millán ha encontrado por fin un cajero con el que poder recuperar su liquidez peregrina (yo le ofrecí una ayuda de urgencia que rechazó amablemente), y salimos de Mansilla por el puente del Esla por un tramo muy desagradable pegado a la carretera general con un tráfico horrible. Lo peor es que es sólo el principio de lo insoportable que es la entrada a León.
Al menos la entrada a Puente Villarente la han cambiado ya que han hecho una pasarela sobre el río y ya no hay que pasar por la carretera.
En seguida se abandona un rato la carretera y nos dirigimos en suave ascenso hasta Arcahueja donde hemos parado a tomar algo y descansar un momento. Yo he aprovechado para llenar agua,porque me había quedado sin ninguna. Un borracho de pueblo nos ha amenizado la estancia entre tirarle los tejos a la camarera y llevarse el vaso con el cubata ya vacío.
Desde aquí hay una fuerte subida que corona en un polígono industrial y ya, paralelo a la carretera llegamos hasta Puente de Castro y León.
El largo paseo por las avenidas nos ha dejado a Millán en las Carvajalas y a mi en el Unamuno.
Tras la ducha y el lavado de ropa me he dado una vuelta buscando cajero BBVA con el que preparar mi tránsito por el camino del Salvador a partir de mañana, ya que creo que no voy a encontrar muchas cosas.
Luego cerveza en el barrio húmedo haciendo tiempo y mandando mensajes a los amigos. Sobre la 13:30 ha aparecido Millán y nos hemos tomado un vino (él cerveza) y unos pimientos de padrón. Luego hemos ido a comer al restaurante La pintona, en la Plaza San Martín. Buen menú por 12 euros con sopa de lentejas y codillo asado (mejorable).
Después he regresado al Unamuno con charlas por Skipe con Mar y con Isabel, ver el capítulo de ayer de Cocinados y… Me voy al húmedo a tomar unas Cañas y cenar
Hasta mañana, gente.
Resumen de la etapa: 25,2 en 4h 56 min a 5,75 de media. Enlace en Wikiloc

20140717-193821-70701457.jpg

20140717-193854-70734885.jpg

20140717-193944-70784843.jpg

20140717-194350-71030904.jpg

20140717-194513-71113523.jpg

Leer entrada

Deja un comentario