Santiago entre la tragedia


He tardado mucho en escribir esta última entrada sobre la llegada a Santiago porque nuestro final de camino coincidió con la tragedia del tren allí. Esa misma noche en Padrón comenzamos a escuchar noticias tremendas sobre lo que estaba ocurriendo a pocos quilómetros de donde nos encontrábamos y por donde pasaríamos al día siguiente.

La etapa estuvo a la altura de la tragedia: no paró de llover y hacer mal tiempo. Sin contratiempos y muy entristecidos por lo que íbamos conociendo llegamos a Santiago según lo previsto.

Lo demás fue hacer un recorrido como siempre. Nada especialmente resaltable para añadir.

 

Os dejo enlace al recorrido final ver en runtastic

 

2013-07-25 07.21.18 2013-07-25 11.28.14 2013-07-25 12.34.57

Anuncio publicitario

Historias de trenes


Al final el aviso del niño capullo no ha sido para tanto porque le han dado una maquinista de juegos y no ha vuelto a respirar en todo el viaje. Mientras Mar terminaba con su siesta borreguera yo he visto una película sobre cocineros franceses que no ha estado mal; lo peor de todo ha sido el audio que hacía un ruido infernal que rozaba el castigo.
Cuando el niño de delante ha dejado de incordiar ha tomado el relevo una enana tamaño botijo (y forma) que al terminar el juego de su iPad ha montado la de Cristo. Yo me he quedado asombrado de que el chico del asiento de al lado no hacía nada por calmarla y he pensado que menudo morro. Cuando Mar ha despertado se lo he comentado y ella, mirándome fijamente a los ojos con cara de asombro me ha espetado: «pero si no tienen nada que ver, el chico estaba ya en el tren cuando se,ha subido la madre y la hija».
El resto del viaje sin novedad hasta Chamartín. Plato combinado sencillo y económico mientras hacía uso de mi infraestructura para recargar dispositivos con el ladrón.
A la hora prevista os hemos montado en nuestro tren hotel, visita a la cafetería rápida y poco más. La noche no va a dar mucho más de sí porque esto es muy estrechó y sólo permite estar tumbados en la litera (cada uno en la suya, que son estrechas). Mañana os cuento si hemos logrado dormir.

20130628-225229.jpg